Los taludes naturales o artificiales son vulnerables ante la acción del agua y el movimiento de masas,
generando panoramas críticos donde estos fallan, por ello se utilizan estructuras civiles o naturales
que ayuden a prevenir potenciales riesgos. La construcción de estructuras para estabilizar el talud
es de suma importancia para el área de la ingeniería civil, debido a que los taludes son una constante
en las construcciones civiles como vías o en zonas aledañas a edificaciones. La estabilización
realizada comúnmente en las obras genera grandes impactos en el medio ambiente. Por lo tanto, la
bioingeniería se ha convertido en un foco de interés en el área, ya que con ella se pueden solucionar
las problemáticas presentadas sin afectar de esta manera el medio ambiente que en algunos casos
puede dar solución de forma más eficaz y económica que los métodos convencionales
